
Más allá de la omnicanalidad
El comercio moderno enfrenta una encrucijada única: la constante evolución del comercio electrónico, liderada por gigantes como Amazon, y la persistente relevancia de las tiendas físicas. En este episodio escucharemos a Mana Maná (también conocido como Arturo López Valerio) 😀 examina cómo la estrategia omnicanal, aunque poderosa, no es una solución universal para los retos del comercio minorista actual. La omnicanalidad es una estrategia de ventas y marketing que proporciona una experiencia de cliente coherente y unificada a través de múltiples canales y puntos de contacto, incluyendo tiendas físicas, comercio electrónico, redes sociales, aplicaciones móviles, y atención al cliente. Esta estrategia busca integrar y sincronizar estos canales para que los clientes puedan moverse sin problemas entre ellos, disfrutando de una experiencia fluida y consistente, independientemente del canal que elijan para interactuar con la marca o realizar sus compras. Amazon ha establecido un estándar de excelencia en el comercio electrónico, con ingresos netos que superaron los 500.000 millones de dólares en 2022. Este logro se atribuye en parte a su innovadora estrategia de marketing, como Amazon Prime Day, que ha revolucionado las ventas en línea desde 2015. Sin embargo, esta historia de éxito en el mundo digital no se ha traducido con la misma facilidad al ámbito de las tiendas físicas. A pesar de su dominio en línea, Amazon ha enfrentado obstáculos significativos en el comercio físico. Sus experimentos con tiendas físicas, incluyendo Amazon Go y Amazon Fresh, han tenido un éxito mixto. Esto sugiere que las fortalezas de Amazon en el comercio electrónico, como su vasta selección y rápidas entregas, no necesariamente se traducen en una ventaja competitiva en el comercio físico, especialmente en categorías más especializadas como la moda. El caso de HomeGoods El minorista HomeGoods en los Estados Unidos con su cadena de decisiones nos presenta un interesante […]